Patologías

Desprendimiento de Retina
El desprendimiento de retina se produce cuando la retina que es la capa más delgada y más interna del ojo se desprende de la pared ocular.
Esto ocurre generalmente por la presencia de agujeros y desgarros en la retina (desprendimiento de retina regmatógeno), aunque también puede ser secundario a enfermedades como la retinopatía diabética proliferativa (desprendimiento de retina traccional), tumores (desprendimiento de retina seroso) y enfermedades inflamatorias entre otros.
- Destellos luminosos y moscas volantes. En el 60% de los casos pueden aparecer síntomas premonitorios como destellos luminosos (fotopsias) y moscas volantes (miodesopsias).
- Defecto en el campo visual. Tras un periodo de tiempo aparece un defecto del campo visual, el paciente lo suele describir como telón o cortina negra.
- Pérdida de visión central. Aparece cuando se ve afectada la mácula.
- El desprendimiento de la retina se diagnostica revisando el fondo de ojo después de la dilatación de la pupila.
El desprendimiento de retina se considera una emergencia médica y su pronóstico suele ser favorable en los casos de aparición reciente. Es fundamental que los pacientes acudan al retinólogo y se realicen el tratamiento indicado una vez se diagnostique la condición ya que de esto depende el pronóstico visual. Los avances en terapias médicas y en microcirugía vitreorretiniana han hecho posible que la mayoría de estos casos tengan un pronóstico favorable si se diagnostican a tiempo.
El Dr. Andrés Amaya, retinólogo en Bogotá, es su mejor aliado en este tratamiento ya que cuenta con una experiencia de más de 4.000 casos de desprendimiento de retina operados exitosamente.
Utilizando técnicas de última generación como vitrectomía 23 y 25G, asociadas a cerclaje escleral, fotocoagulación con endoláser, cirugía bimanual, pelaje de proliferaciones y retinectomía entre otros, logra reaplicar la retina en más del 95% de los casos. Cabe anotar que el pronóstico visual va de la mano del tiempo de evolución y la severidad del desprendimiento.
Paciente de 48 años con diagnóstico de desprendimiento de retina en ojo izquierdo. La agudeza visual es de 20/400 Después del tratamiento se aprecia la retina completamente adherida y los agujeros causantes del desprendimiento bloqueados con gas y posteriormente con la indentación producida por el cerclaje escleral. La agudeza visual es de 20/30.
Cataracts
Las cataratas son la opacificación del cristalino que es el lente interno del ojo. La aparición de se asocia generalmente a la edad y a algunas enfermedades crónicas como la diabetes. También pueden aparecer desde el nacimiento (congénitas) o luego de trauma e inflamación ocular.
Los principales síntomas de las cataratas son mala visión nocturna, visión borrosa y pérdida en la definición de los colores.
El tratamiento más avanzado para corregir las cataratas es la aspiración de la misma por medio de ultrasonido o facoemulsificación, con implante de lente intraocular. Los avances quirúrgicos permiten realizar este procedimiento por medio de incisiones menores a 3 milímetros, utilizando lentes plegables que se inyectan en el globo ocular y que dentro de él se abren y vuelven a su forma original, generando mayor seguridad y una recuperación más rápida de la visión.
Cirugía de Cataratas o Facoemulsificación:
En la actualidad la cirugía de cataratas se ha convertido en un procedimiento mínimamente invasivo, con recuperación muy rápida de la visión y con posibilidad de que el paciente se reincorpore a sus actividades al poco tiempo de haber sido operado.
El Dr. Andrés Amaya es su mejor aliado en este tratamiento.
El Dr. Amaya ha realizado cirugía de cataratas de mínima incisión por facoemulsificación en más de 1.500 pacientes, implantando diferentes tipos de lentes intraoculares que permiten al paciente recuperar su visión y en algunos casos lograr la independencia de sus anteojos.
Paciente de 71 años con diagnóstico de cataratas en el ojo derecho, su agudeza visual es de 20/400. Luego de una semana de la cirugía de cataratas por facoemulsificación e implante de lente intraocular plegable su agudeza visual es de 20/20.


Presbicia y lentes multifocales
La presbicia es una condición que se presenta después de los cuarenta años y que se caracteriza por la pérdida progresiva en la capacidad para ver de cerca.
La presbicia se presenta en todos los pacientes mayores de cuarenta años y es producida por la pérdida en la capacidad de acomodación del cristalino, que es lente interno del ojo.
La forma más común para corregir la presbicia es por medio de lentes para ver de cerca. Actualmente se ofrecen algunos tratamientos quirúrgicos para corregir la presbicia, como lo son la monovisión y el implante de lentes multifocales. En la monovisión se realiza cirugía refractiva por medio de láser dejando el ojo dominante para visión lejana y el ojo no dominante para visión cercana. Está indicada en pacientes con presbicia y algún tipo de defecto refractivo como miopía e hipermetropía sin presencia de catarata.
¿Qué son los lentes multifocales (implantes intraoculares)?
Los lentes multifocales permiten ver de lejos y de cerca por medio de efectos difractivos y están indicados en pacientes con presbicia y algún grado de catarat
RECUPERE SU AGUDEZA VISUAL 20/20 PARA LEJOS Y DE 100% PARA CERCA EN UNA SEMANA
Paciente de 72 años y diagnóstico de catarata en ojo derecho a quien se le implantó un lente multifocal para corrección de presbicia. Luego de una semana de su cirugía de catarata por medio de facoemulsificación e implante de lente intraocular plegable multifocal su agudeza visual es de 20/20 para lejos y de J1 (100%) para cerca. Nótese el diseño especial del lente con varios anillos concéntricos que permiten conseguir el efecto difractivo deseado.
Degeneración macular relacionada con la edad o DMRE
La degeneración macular relacionada con la edad o DMRE es una enfermedad de la retina producida por los años.
Otros factores asociados a la aparición de la DMRE son la raza blanca, el tabaquismo, la exposición a los rayos del sol y los factores genéticos.
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Los pacientes que padecen esta enfermedad refieren distorsión y pérdida de la visión central (función macular) mientras que el campo visual se encuentra conservado. Hay dos tipos de DMRE: seca y húmeda. La DMRE seca es la más frecuente pero la menos grave, se caracteriza por cambios en una capa de la retina llamada el epitelio pigmentario y en sus etapas avanzadas por atrofia (pérdida de tejido) de la retina. La DMRE húmeda es la menos frecuente pero la más grave, se caracteriza por la presencia de unas alteraciones vasculares por debajo de la retina llamadas membranas neovasculares coroideas que son las principalmente responsables de la pérdida visual.
- Defecto en el campo visual. Tras un periodo de tiempo aparece un defecto del campo visual, el paciente lo suele describir como telón o cortina negra.
- Pérdida de visión central. Aparece cuando se ve afectada la mácula.
- El desprendimiento de la retina se diagnostica revisando el fondo de ojo después de la dilatación de la pupila.
Hace algunos años no existía tratamiento para la degeneración macular relacionada con la edad, y los pacientes perdían su visión central de manera irreversible. Con la aparición de la terapia antiangiogénica intravítrea, estos pacientes tiene una esperanza real de mantener su visión y en muchos casos de recuperarla parcial o totalmente. Los suplementos vitamínicos con altas concentraciones de nutrientes para la retina han permitido que la enfermedad no progrese en los pacientes que la padecen, y en algunos casos, que estos mismos pacientes experimenten mejoría visual.
El Dr. Andrés Amaya es su mejor aliado en este tratamiento
El Dr. Amaya tiene una amplia experiencia en el uso de antiangiogénicos intravítreos, con más de 10.000 casos tratados exitosamente. La posibilidad de acceder a diferentes medicamentos y de aplicarlos de acuerdo a un criterio médico y científico óptimo, permite que los pacientes con degeneración macular obtengan los mejores resultados posibles.
MEJORE SU AGUDEZA VISUAL HASTA 20/40
Paciente de 63 años con diagnóstico de degeneración macular relacionada con la edad tipo húmeda y miopía degenerativa en ojo izquierdo. Antes del tratamiento se observa la presencia de una hemorragia submacular y una membrana neovascular coroidea en el área macular la cual afecta directamente la visión central. La agudeza visual es de cuenta dedos a un metro. Después del tratamiento se aprecia una resolución de la hemorragia submacular y de la membrana neovascular con mejoría de la agudeza visual a 20/40.


Agujero macular
El agujero macular es una enfermedad caracterizada por la presencia de un agujero en la mácula, que es el área de la retina encargada de la visión central. Es ligeramente más frecuente en mujeres y puede ser bilateral (afectar ambos ojos). Los pacientes con esta condición suelen referir distorsión en las imágenes y visión de una mancha negra en el centro.
¿Qué son los lentes multifocales (implantes intraoculares)?
Los lentes multifocales permiten ver de lejos y de cerca por medio de efectos difractivos y están indicados en pacientes con presbicia y algún grado de catarat
RECUPERE SU AGUDEZA VISUAL 20/20 PARA LEJOS Y DE 100% PARA CERCA EN UNA SEMANA
Paciente de 72 años y diagnóstico de catarata en ojo derecho a quien se le implantó un lente multifocal para corrección de presbicia. Luego de una semana de su cirugía de catarata por medio de facoemulsificación e implante de lente intraocular plegable multifocal su agudeza visual es de 20/20 para lejos y de J1 (100%) para cerca. Nótese el diseño especial del lente con varios anillos concéntricos que permiten conseguir el efecto difractivo deseado.
Pterigion
Cuando se produce este crecimiento, se altera la lubricación normal de la córnea producida por el parpadeo, y aparecen síntomas como ojo rojo, ardor, sensación de cuerpo extraño y lagrimeo.
El factor más comúnmente asociado a la aparición de pterigion es la exposición crónica a los rayos ultravioleta del sol. Si el pterigion no se trata a tiempo, continúa creciendo y puede afectar la visión, ya sea por producir distorsión en la curvatura de la córnea (astigmatismo) o por obstruir del eje visual.
El tratamiento más avanzado para la corrección del pterigion consiste en un pequeño procedimiento quirúrgico en el cual se extrae el pterigion y en su lugar se implanta un autoinjerto de la región superior de la conjuntiva que incluye células limbares o progenitoras de la córnea. Esta técnica quirúrgica garantiza en más del 90% que el pterigion no vuelva a aparecer.
Paciente de 52 años y diagnóstico de pterigion en ojo izquierdo. Luego de un mes de la cirugía de resección de pterigion más autoinjerto conjuntival y transplante de células limbares se aprecia una resolución completa del cuadro clínico y una apariencia adecuada del globo ocular.


Epiretinal Membrane
La membrana epirretiniana es una condición caracterizada por la presencia de una pequeña membrana sobre la pared interna de la retina. Estas membranas suelen producir distorsión en la superficie de la retina e inflamación (edema) de la macula, lo cual conlleva a los síntomas referidos por el paciente como visión borrosa y deformación en las imágenes, aunque en muchos casos y sobre todo cuando la membrana está en fases iniciales los pacientes pueden ser asintomáticos.
El tratamiento está indicado cuando los pacientes presentan una pérdida visual significativa (agudeza visual peor a 20/40) o cuando la deformación en las imágenes es muy marcada.
El tratamiento consiste en una cirugía llamada vitrectomía en la cual se retira el humor vítreo del ojo y posteriormente se reseca la membrana epirretiniana. Los avances en instrumentación y microcirugía permiten lograr la resección completa de la membrana con la mejoría visual subsecuente en la mayoría de casos. En un pequeño porcentaje (menos del 10%), puede haber recurrencia en la aparición de la membrana.
Retinopatía diabética
La retinopatía diabética es la manifestación de la diabetes mellitus en los ojos. Actualmente la retinopatía diabética es la principal causa de ceguera no reversible a nivel mundial en pacientes entre los 20 y los 65 años (adultos de edad productiva). Esta enfermedad se produce por el control inadecuado de la diabetes durante varios años y sus manifestaciones clínicas generalmente comienzan luego de más de 5 años del momento en que se realizó el diagnóstico de diabetes.
Esta enfermedad se presenta dos formas: no proliferativa y proliferativa. Las principales causas de pérdida visual en pacientes con retinopatía diabética son el edema macular (engrosamiento de la retina), la hemorragia intraocular (hemorragia vítrea) y el desprendimiento de retina.
Con frecuencia, el paciente no es consciente de la enfermedad hasta que el daño es severo. Los síntomas de retinopatía diabética pueden ser:
- Visión borrosa y pérdida gradual de la visión
- Visión de manchas o «moscas volantes»
- Sombras o áreas de visión perdidas
- Dificultad para ver de noche
Hasta hace algunos años el pronóstico visual de los pacientes con retinopatía diabética avanzada (retinopatía diabética proliferativa severa) era muy pobre. Actualmente los avances en microcirugía vitreorretiniana y en terapia intravítrea antiangiogénica han cambiado el rumbo de esta enfermedad y ahora muchos pacientes con enfermedades avanzadas pueden ser sometidos a procedimientos encaminados a evitar la progresión de la pérdida visual e incluso mejorar la visión. Es importante recalcar que la base del tratamiento continúa siendo el control adecuado de la diabetes.
El Dr. Andrés Amaya es su mejor aliado en este tratamiento.
Los casos complejos de retinopatía diabética, especialmente los asociados a desprendimiento de retina traccional, son considerados verdaderos retos para el cirujano de vítreo y retina. El Dr. Amaya tiene una amplia experiencia en el manejo quirúrgico de estos pacientes. Con un número mayor a 3.000 cirugías para manejo de complicaciones oculares secundarias a retinopatía diabética, y utilizando las técnicas intraoperatorias más modernas como vitrectomía 23 y 25G, fotocoagulación con endoláser, segmentación, delaminación, pelaje de proliferaciones fibrovasculares y cirugía bimanual, logra un éxito anatómico en más del 90% de los casos. Cabe anotar que el pronóstico visual va de la mano del tiempo de evolución y la severidad del desprendimiento.
RECUPERE SU AGUDEZA VISUAL
Paciente de 54 años con diagnóstico de retinopatía diabética proliferativa y hemorragia vítrea secundaria en ojo derecho. Su agudeza visual es de movimiento de manos. Luego de la vitrectomía se aprecia una resolución completa de la hemorragia y se observa la retina aplicada, con cicatrices de láser en 360 grados. Su agudeza visual es de 20/25.


Oclusiones vasculares
Las oclusiones vasculares se presentan cuando un vaso arterial o venoso de la retina se obstruye. Cuando esto ocurre se produce una alteración en el flujo normal hacia los tejidos de la retina produciendo un estado de mala oxigenación o isquemia así como congestión y edema lo que conlleva a pérdida visual. Aunque las obstrucciones venosas son más frecuentes que las arteriales, suelen ser menos severas y presentar mejor pronóstico. La causa de pérdida visual en los pacientes con oclusiones arteriales es la isquemia mientras que en las oclusiones venosas la causa puede ser isquemia, edema o ambas.
Actualmente los avances en terapias médicas e intravítreas ofrecen posibilidad de mejoría visual en los casos con componente edematoso. Es muy importante entender que las oclusiones vasculares son consecuencias de algún tipo de problema sistémico por lo cual todo paciente que presente este cuadro debe ser valorado por un médico internista o un cardiólogo.
Paciente de 50 años con diagnóstico de oclusión de la vena central de la retina y edema macular secundario en ojo derecho. Su agudeza visual es de 20/200. Luego del tratamiento se aprecia mejoría de las hemorragias intrarr
Ambliopía
La ambliopía se produce cuando hay una deficiente estimulación visual hacia la corteza occipital por parte de uno o ambos ojos.
Las causas más comunes de ambliopía son la anisometropia (diferencia muy marcada de refracción entre un ojo y otro), la hipermetropía alta que no se corrige adecuadamente, el estrabismo y la catarata congénita o infantil entre otros.
El estrabismo es la desviación de los ojos. Generalmente los ojos deben presentar una alineación y una congruencia en su dirección y en sus movimientos la cual está dada por factores musculares (músculos que mueven a los ojos) y factores neurológicos (nervios que los controlan). El estrabismo puede ser primario (sin origen aparente) o secundario a diversas causas como alteraciones refractivas (hipermetropía), daño neurológico (paresias), ausencia de estímulo visual y trauma entre otras. El estrabismo puede presentarse todo el tiempo o ser intermitente, y la desviación puede presentarse hacia los lados (endotropia, exotropia), hacia arriba (hipertropia) o hacia abajo (hipotropia).
La ambliopía se maneja por medio de la corrección adecuada de la causa subyacente y por medio de terapias de oclusión en las cuales se ocluye el ojo no afectado para estimular el ojo afectado ambliope. Es muy importante recalcar que estas medidas deben realizarse antes de los nueve años ya que después de esta edad la visión no puede recuperarse adecuadamente.
El tratamiento del estrabismo depende de diversos factores, pero en general se puede manejar con medidas refractivas (gafas), cirugía o aplicación de toxina botulínica.


Distrofias de la Córnea
Las distrofias de la córnea son un grupo de enfermedades que suelen ser heredadas y que comienzan a manifestarse típicamente en etapas tempranas de la vida. Estas enfermedades son lentamente progresivas y bilaterales (aparecen en ambos ojos).
La manifestación más común de las distrofias corneales es la visión borrosa. La principal característica de este grupo de enfermedades es el depósito de diversas sustancias en las diferentes capas de la córnea, por lo que se clasifican de acuerdo a la capa de la córnea que sea afectada. Así, las distrofias corneales pueden ser epiteliales, de la membrana de Bowman, estroma o endotelio. Su origen suele estar determinado por alteraciones y mutaciones genéticas.
Desafortunadamente hasta el momento no existe ningún tratamiento exitoso probado para el manejo de estas enfermedades ni para evitar su progresión. En algunos pacientes se puede presentar progresión de la enfermedad hasta requerir un transplante de córnea, el cual en la mayoría de casos es exitoso.
Uveítis
La uveítis es una enfermedad caracterizada por la inflamación de una o varias estructuras intraoculares. De acuerdo a la localización de esta inflamación la uveítis puede ser anterior, intermedia o posterior. La uveítis puede ser primaria, es decir sin causa aparente, o secundaria a diversas patologías como enfermedades autoinmunes, infecciones, tumores y trauma entre otros. Es importante en los pacientes con uveítis realizar un estudio cuidadoso de la causa subyacente o de algún tipo de enfermedad sistémica asociada.
El manejo de los cuadros de uveítis depende de la causa que la produzca, una de las bases del tratamiento es el manejo con medicamentos antiinflamatorios esteroideos, no esteroideos e inmunomoduladores para controlar la respuesta inflamatoria. Cuando se produce algún tipo de secuela como catarata o edema macular, el tratamiento quirúrgico sueles estar indicado.


Endophthalmitis
La Endoftalmitis es una inflamación severa de las estructuras del globo ocular. Generalmente es secundaria a una infección luego de cirugía o algún procedimiento intraocular o de trauma penetrante. Es una condición severa que tiene pronóstico reservado, especialmente en los casos en los que el diagnóstico se hace de manera tardía. Los síntomas más frecuentes de endoftalmitis son dolor ocular severo, pérdida visual, secreción conjuntival abundante, ojo rojo e inflamación conjuntival.
El manejo de esta patología se realiza por medio de la aplicación de antibióticos intraoculares en la cavidad vítrea, y en casos severos por medio de vitrectomía y aplicación de antibióticos intravítreos.
Ojo seco
El ojo seco es una entidad caracterizada por la escasa o deficiente producción en la cantidad y calidad de la lágrima. Esto produce síntomas como irritación, sensación de cuerpo extraño, ojo rojo y visión borrosa. El ojo seco es una enfermedad más frecuente en mujeres y puede o no estar asociada a algunos padecimientos sistémicos como la artitis reumatoidea, síndrome de Sjögren y lupus eritematoso sistémico. Por esta razón es importante evaluar de manera integral a los pacientes con este padecimiento y que sean valorados por un reumatólogo.
El tratamiento del ojo seco depende de la causa y generalmente hay que manejar algún factor predisponente para que el resultado sea exitoso. Además de esto, los medicamentos lubricantes que mejoran la película lagrimal y algunos fármacos directamente relacionados con la respuesta inflamatoria son de mucha utilidad. Hay que recordar que estos tratamientos son generalmente para uso crónico ya que en la mayoría de casos no hay cura para este padecimiento. Si a pesar del tratamiento médico los síntomas persisten, los tapones y la oclusión de puntos lagrimales son el siguiente paso en el manejo de estos pacientes.


Conjuntivitis
La conjuntivitis infecciosa es la inflamación de la conjuntiva producida por una infección que suele ser producida por bacterias o por algunos tipos de virus. Generalmente este tipo de conjuntivitis no suelen ser graves ni afectan la visión de manera permanente pero pueden ser muy incapacitantes para los pacientes. Los síntomas más comunes son ojo rojo, ardor, lagrimeo, sensación de cuerpo extraño, fotofobia y secreción hialina (transparente), amarilla o verdosa.
La conjuntivitis alérgica es una enfermedad caracterizada por una inflamación de la conjuntiva producida por una respuesta alérgica a diversos estímulos externos. La respuesta alérgica es un proceso caracterizado por la liberación exagerada de algunos componentes de la cascada de la inflamación que producen síntomas como ojo rojo, ardor, lagrimeo, fotofobia y comezón. La conjuntivitis alérgica es más frecuente en las personas jóvenes y en algunos casos los síntomas se van resolviendo a medida que los pacientes van creciendo.
El tratamiento de esta entidad se basa en el uso de medicamentos antibióticos en el caso de conjuntivitis bacterianas, lubricantes oculares y antiinflamatorios esteroideos y no esteroideos. Es importante recalcar que aunque estos cuadros no son graves, son bastante contagiosos por lo cual se recomienda a los pacientes afectados tomar medidas de precaución para evitar la transmisión a otras personas.
Corneal Herpes
El herpes es un virus que produce diversos trastornos a nivel de las mucosas como los fuegos en la boca entre otros. A nivel de los ojos el herpes puede producir conjuntivitis y queratitis (inflamación en la córnea) herpética. El modo de transmisión suele ser por contacto directo con secreciones de pacientes afectados (gotas de saliva, lágrimas, etc) y la infección por el virus puede producir diversos cuadros a nivel ocular que van desde conjuntivitis leve hasta queratitis dendrítica e intersticial e incluso uveítis en los casos más severos.
La enfermedad por herpes puede ser recurrente ya que el virus permanece en forma latente y tiende a reactivarse en estados de inmunosupresión como cuadros gripales o cuando el paciente se expone a la luz solar. Si la enfermedad no se trata de manera adecuada puede dejar secuelas visuales severas para los pacientes como cicatriz corneal disciforme y queratitis neurotrófica. Los síntomas más comunes de la enfermedad por herpes dependen del tipo de presentación y de la severidad del caso, pero en general los pacientes se quejan de ojo rojo, ardor, dolor, lagrimeo, fotofobia, sensación de cuerpo extraño, visión borrosa y secreción conjuntival.


Úlcera corneal
La úlcera corneal es un defecto en la superficie de la córnea que puede ser producido por trauma o por infecciones virales, bacterianas, parasitarias y micóticas (hongos). Los síntomas más comunes de la úlcera corneal son ojo rojo, ardor, dolor, lagrimeo, fotofobia, visión borrosa, sensación de cuerpo extraño y secreción conjuntival blanca, amarilla o verdosa.
Si la úlcera no es infecciosa, el tratamiento consiste en la adecuada lubricación y la oclusión ocular durante un par de días. Otra opción para evitar la oclusión es el uso de un lente de contacto terapéutico. Si la úlcera es infecciosa se debe evitar la oclusión, y se deben iniciar medicamentos contra la infección y lubricantes oculares de manera frecuente hasta que los síntomas se resuelvan.
El tratamiento de la enfermedad por herpes consiste en el uso de medicamentos antivirales tópicos y orales, lubricantes y antiinflamatorios NO esteroideos.
Queratocono
El queratocono es una enfermedad degenerativa de la córnea en la cual esta pierde su forma esférica y toma progresivamente una forma de cono que produce un efecto miópico y un astigmatismo irregular. Esta es una enfermedad que suele afectar a ambos ojos; comienza a manifestarse en la segunda década de la vida y progresa hasta llegar a un daño estructural y permanente de la córnea. Muchos pacientes presentan historia de rascado ocular crónico.
Hasta hace un par de años, el único tratamiento para el queratocono era el uso de lentes de contacto gas permeables para manejar la miopía y el astigmatismo, y en los casos muy severos o con mala tolerancia a los lentes de contacto, la única opción era el transplante de córnea. Actualmente los adelantos en microcirugía han permitido el desarrollo de técnicas como el implante de anillos intraestromales y el “crosslinking” corneal que disminuyen el riesgo de progresión del queratocono y la necesidad de transplante, además de fortalecer la córnea y mejorar la calidad visual de estos pacientes.

Miopía, hipermetropía y astigmatismo
La miopía se produce por un aumento en el eje anteroposterior del ojo mientras que la hipermetropía se manifiesta en ojos con ejes anteroposteriores disminuidos. El astigmatismo se produce cuando la córnea, que es el principal lente del ojo, presenta una diferencia significativa entre su meridiano más plano y el más curvo.
Estos defectos refractivos pueden ser corregidos por medio de gafas, lentes de contacto o cirugía. En la cirugía refractiva se realiza una ablación de la córnea por medio de láser, con lo cual se modifica su curvatura produciéndose un efecto similar al obtenido con lentes de contacto o gafas. Actualmente los equipos de láser modernos corrigen no solo los defectos refractivos mencionados sino que también corrigen otro tipo de defectos, llamados aberraciones de alto orden, que son los responsables de la mala visión nocturna y de los halos en la oscuridad, lográndose la mejor calidad visual posible. En los casos en los que los defectos refractivos son muy altos, el implante de lentes intraoculares llamados lentes fáquicos son la mejor opción ya que proveen la mejor calidad visual.
RECUPERE SU VISIÓN 20/20
Paciente de 23 años con miopía de 2.00 dioptrias en el ojo derecho. Su agudeza visual es de 20/200 La topografía preoperatoria evidencia una córnea de aspecto normal. En la foto de la córnea 6 horas luego de la cirugía LASIK, el colgajo corneal es apenas perceptible y la apariencia es completamente normal. La topografía postoperatoria demuestra un aplanamiento en el centro de la córnea. Su agudeza visual es de 20/20.
Glaucoma
En general el tratamiento del glaucoma busca evitar que el problema avance, la mayoría de las medidas están encaminadas a controlar la presión intraocular dentro de rangos normales. Inicialmente se inicia el tratamiento con medicamentos tópicos (gotas) y si no es posible controlar la presión, se realizan procedimientos con láser o cirugía (trabeculectomía o implante de válvula en cámara anterior) de acuerdo al tipo de padecimiento que presente el paciente.

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